Nelson: Capitulo 3

Nelson se sentía bien, se sentía poderoso, al fin y al cabo, dos hombres hechos y derechos estaban siendo acorralados por un muchacho de 19 años sin experiencia con las armas.

Entonces pasó lo que Nelson no se había planteado. Uno de los hombres, Jerry, sacó de uno de los bolsillos de su traje una pistola, pequeña y discreta, pero cargada y lista para disparar.

-Se acabó el juego, chico.- Jerry apuntaba a Nelson con la pistola mientras mantenía el dedo en el gatillo- Estas muerto.

Nelson creyó verlo todo a cámara lenta.  Como era apretado el gatillo, como salía la bala del cañón de la pistola, incluso a si mismo moviéndose hacia la derecha para intentar esquivar la bala. Todo creyó verlo a cámara lenta hasta el momento en el que la bala pasó rozando su brazo y provocándole una herida que, aunque leve, era terriblemente dolorosa para Nelson, que cayó de rodillas al suelo sujetándose el brazo izquierdo por debajo de la herida sangrante.

-Mierda, Jerry- dijo Jake quitándole el arma- Solo lo has rozado.

-¡Oye! ¡Devuélveme la pistola!

-Calla y aprende- Jake apuntó a Nelson con la pistola mientras este se levantaba.- Yo no voy a fallar chico.

Nelson se levantó y empuñó de nuevo su daga, con la fuerza que sólo tienen aquellos que ven su muerte a la vuelta de la esquina, con el valor que solo tienen quienes saben que solo tienen unos segundos para luchar por seguir viviendo.

Al ver la reacción de Nelson, Jake bajó la guardia unos instantes, sorprendido. Y en esos instantes, sin pronuncias palabra, Nelson se abalanzó sobre el, arrancándole el arma de las manos y clavando la daga en su abdomen varias veces. Luego se giró hacia Jerry, lamiendo la sangre que había quedado en su daga, sonriendo con aspecto de haberse escapado de un manicomio.

-Ahora vas a hablar- dijo Nelson acercándose a Jerry- Vas a contármelo todo, todo.

-Y-yo te juro que no se nada- Jerry levantó las manos con las palmas abiertas hacia Nelson en gesto de inocencia- S-solo se que en la mafia del Viejo si incumples alguna norma estas muerto, pero si le caes bien puedes llegar a ganar mucho dinero...

-Quiero el nombre del Viejo- Exigió Nelson.

-N-no lo se, ni siquiera le he visto personalmente, solo sus más cercanos lo conoces realmente, todos lo llaman "El Viejo"

-Que pena- susurró Nelson- No me sirves de nada, saluda a Jake.

Segundos después el cuerpo de Jerry, tirado sobre el de Jake, manchaba de color rojo sangre la alfombra del elegante vagón. Nelson salió de allí y se detuvo en el primer baño para limpiar su cara, sus manos, sus ropas y la daga de la sangre de aquellos dos hombres. El brazo le escocía otra vez, la herida no era profunda así que con un trozo mojado de su camiseta Nelson improvisó una venda y se quedó allí hasta el final del trayecto.